En general, los vinicultores tienden a sentirse orgullosos de sus logros, habilidades, sutilezas y maestrías.Nosotros, no tenemos mucho tiempo para tal auto-elogio; de hecho, no creemos que hagamos demasiado por nuestro vino. Es la naturaleza quien lo facilita todo para nosotros: el viento, el sol, la lluvia, la tierra, los pájaros, mariquitas (Coccinellidae), la luna, insectos, escarabajos, abejas y hormigas. Lo […]
a través de SENTIRSE COMO EN CASA – Klaus Fabricius — BlogConCiencia